La etapa arrancaba
hoy sin la presencia de Greg Van Avermaet (BMC), ganador en Rodez, que volvía
rápidamente a Bélgica para estar presente en el nacimiento de su hijo.
letour.fr - La
carrera se animaba al poquito de darse el pistoletazo de salida, cuando un
contingente de 29 hombres se desmarcaba del pelotón bajo el impulso de un
siempre motivado Peter Sagan.
Tras 15 kilómetros,
la fuga se escindía en dos grupos de doce corredores.
El primero incluía a
Grivko (Astana), Riblon (AG2R), Sagan (Tinkoff Saxo), De Gendt (Lotto Soudal),
Geschke (Giant Alpecin), Haller (Katusha), Jungels (Trek), Oliveira (Lampre),
Plaza Molina (Lampre), Navarro (Cofidis), Fedrigo (Bretagne Séché) y Pauwels
(MTN).
El segundo, el de
los intercalados, contaba entre sus filas con Erviti (Movistar), Hansen (Lotto
Soudal), Golas (Etixx), Trentin (Etixx), Voeckler (Europcar), Didier (Trek),
Irizar (Trek), Mate (Cofidis), Pantano (IAM), Perichon (Bretagne Séché),
Boasson-Hagen y Teklehaimanot (MTN).
La velocidad media,
aupada por el viento de popa, alcanzaba los 53,6 km/h durante la primera hora
de carrera, demasiado para Peter Kennaugh, que optaba por renunciar.
Sagan acumula
“platas”
Peter Sagan
cosechaba los frutos de su esfuerzo al adjudicarse el esprint intermedio de Die
tras no encontrar oposición entre sus rivales.
Superado este
escollo, aminoraba la marcha, pero el pelotón no parecía dispuesto a
reaccionar, de ahí que el hueco con los fugados aumentara a 8'50" en el
ecuador de la carrera.
En el kilómetro 105,
con Laurent Didier distanciado, los dos grupos de cabeza se fundían en primera
fila, creando un grupo de 23 hombres.
El grueso del
pelotón, con la mente ya puesta en la jornada de descanso, se ha mostrado un
tanto impasible y ha dejado que este grupo se disputara la victoria final.
En el puerto de
Cabre, en el kilómetro 130, Serge Pauwels (MTN) se adjudicaba los cinco puntos
en liza antes de que Sagan se marcara uno de sus espectaculares descensos. Por
detrás, el ganador de Cauterets, Rafal Majka (Tinkoff Saxo), era víctima de una
caída y reanudaba la carrera un tanto tocado en la rodilla izquierda.
Plaza emprende el
vuelo
A 50 km de la meta,
empezaba a cundir el nerviosismo en cabeza de carrera. Diez kilómetros después,
el australiano Adam Hansen se distanciaba de sus compañeros, y pronto se sumaba
a él el austriaco Marco Haller.
Los dos hombres se
han entendido de maravilla y han atacado juntos el puerto de Manse con un
minuto de ventaja sobre el grupo de Sagan. Sin embargo, en el puerto, no han
logrado resistir el ataque de sus perseguidores.
Rubén Plaza ha
sabido aprovechar la oportunidad y se ha desmarcado a tres kilómetros de
coronar, algo que ha hecho con una cómoda renta de un minuto sobre Sagan y los
demás.
El maillot verde
emprendía después un impresionante descenso para alcanzarlo, si bien ha
terminado en segunda posición, y ya van cinco veces, a 30 segundos de la que
hubiera sido su primera victoria en este Tour.
Nibali, combativo de
honor
A más de 18 minutos,
los líderes afrontaban el último desafío antes de la jornada de descanso que
precede a los Alpes.
Después de que lo
intentara Alberto Contador, Vincenzo Nibali se desmarcaba a dos kilómetros de
la cumbre del puerto de Manse para afianzar su ventaja sobre el grupo del
maillot amarillo en el descenso.
El ganador de 2014
recordaba así a Chris Froome.
En la bajada,
empujado inoportunamente por Warren Barguil, Geraint Thomas (SKY) sufría una
aparatosa caída que por suerte no le ha impedido conservar su 6º puesto en la
general.
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