miércoles, 14 de agosto de 2013

Elena Isinbáyeva, la reina rusa del salto con pértiga

© RIA Novosti. Grigory Sisoev
“La vida después del deporte no será tan deslumbrante como ahora. Habrá otros triunfos, como tener hijos. Tendré que aprender a ser una joven, una mujer, una madre. Ahora no tendré que luchar, lo he hecho todo en la pista. No sé qué voy a hacer… me quedaré embarazada. Llevo años demostrándoles algo a todos, y no sé qué voy a hacer ahora. Pero me embarco en esta nueva vida con una gran satisfacción”, dijo la pertiguista, de 31 años, a los periodistas tras cosechar el martes su tercer oro mundial en el Campeonato de Atletismo de Moscú.
Isinbáyeva anunció en julio que concluirá su carrera deportiva tras el Mundial de Moscú. Ayer dijo sin embargo que podría regresar a la pista para competir en los JJOO de Río de Janeiro 2016. “El año que viene, no me verán en las competiciones, pero para el 2016 o volveré o daré por acabada definitivamente mi carrera deportiva”, comentó.
Ayer la legendaria garrochista rusa se adjudicó......
.......el oro mundial al saltar 4,89 metros. Después, hubo tres intentos, todos fallidos, de añadir un nuevo récord de 5,07 metros a su larga lista de 28 marcas mundiales, incluida la de 5,06 metros imbatible hasta hoy.
“Tendré otras dos competiciones hasta el fin de la temporada, así que intentaré marcar un récord mundial. Soy la reina de la pértiga, la corona es mía”, dijo Isinbáyeva al añadir que “no le importa” el no haber podido conquistar ayer una nueva marca mundial.
Según Isinbáyeva, el triunfo de ayer es el más importante de su carrera.
En Moscú 2013, el podio de salto femenino con pértiga lo ocupó el mismo trío que en Londres 2012: Elena Isinbáyeva, la estadounidense Jennifer Suhr y la cubana Yarisley Silva, salvo que esta vez fue la rusa quien se llevó el oro, mientras la plata fue para Suhr, campeona olímpica de Londres, y el bronce, para Silva que se había adjudicado la plata en las Olimpiadas de la capital británica hace casi exactamente un año.

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